20 de julio de 2010

El valle de Saas Fee, Glaciar Fee

Esta mañana hacía fresco en Täsch. El desayuno sirve para ver como ha quedado el blog del último día y corregir algún fallo que se ha colado con las prisas. El otro día corregí una falta de ortografía horrible en la presentación del blog



Nos hemos puesto en camino pronto, queremos ir a Saas Fee que se encuentra en el valle contiguo y llegar pronto para poder instalar la caravana en Saas-Grund y hacer alguna excursión. En Saas Fee pasa como en Zermatt no se permite entrar con vehículos

Al llegar a Saas Grund, donde dejaremos la autocaravana, nos encontramos con mucho caos por las obras de la calle principal que nos obliga a circular por calles estrechas y dar muchas vueltas hasta encontrar un camping. Cuando lo encontramos parece imposible pasar por el estrecho puente de madera que hay que cruzar para entrar en el camping.

Tenemos un poco de desconcierto, la gente habla alemán y un inglés horrible, lo que da lugar a algunos malentendidos a la hora de enterarnos del funcionamiento del camping y de los medios de transporte para subir a Saas Fee, terminamos teniendo que andar tres kilómetros por la carretera para llegar a una parada de autobús adecuada.



Ya en Saas-Fee encontramos muchos “raccards”, algunos en grupos formando casi calles en las que parece que hemos saltado hacia atrás en el tiempo.


Desde el pueblo se ve el final del gigantesco glaciar Fee. Queremos subir a 3.500 m para ver la parte superior, que por las fotos que hemos visto, es muy grande. También vemos algunos de los cuatromiles que adornan el valle como el Dom 4.545 m, el Täschhorn 4.491 m y el Alphubel 4.206m

Vamos a la estación base de Alpin Express, un telecabina que luego conecta con un tren subterráneo del mismo nombre. Atraco a mano armada subir y bajar nos cuesta 178 CHF que son unos 140 €. Ponemos cara de turista y pagamos una subida que vale más que el abono de día para esquiar en invierno.

Llegamos arriba y la verdad nos decepciona, viniendo de donde venimos. El glaciar es enorme y desde arriba hay visión de otros tres cuatromiles que cierran el valle.


El Allanlinhorn de 4.027 metros dicen que es el cuatromil más visitado y fácil de Suiza pero desde aquí impresiona bastante




Hay cortados de hielo del glaciar que superan los 100 m de altura


Con los prismáticos vemos a lo lejos algo que no habíamos visto nunca y que aumenta un poco más la sensación de que Saas Fee nos está decepcionando un poco. Hay una excavadora en mitad del glaciar “arreglándolo”

Nos terminamos de comprender qué hay que arreglar aquí


El personal que circula por el mirador a 3.500 m de altura nos resulta chocante viniendo de otros sitios con tanto ambiente montañero.

Nos sentamos a comer algo aunque los efectos de la altura se notan en los mayores de 50 especialmente


Hacia el valle la visión es fantástica el glaciar se lanza hacia el vacío del valle

Como ya no podemos decepcionarnos mucho más nos metemos en una cueva de hielo en el interior del glaciar.




Totalmente para “guiris” y no digamos nada de la instalación eléctrica de la cueva…….. y luego tenemos fama de chapuzas nosotros.

Llegamos a una sala con esculturas en el hielo para que los “guiris” disfrutemos más si cabe. No nos gusta.


Y decidimos descender en el carísimo telecabina mientras decidimos que en Saas Fee no nos quedamos más días. Mañana carretera y manta.



Bajando se nota calor y hay que quitarse las perneras del pantalón


Los “raccards” si que nos gustan, tienen una estética especial.



Pensamos que para arreglar el día vamos a bajar andando por una senda hasta Saas Grund. Es una hora de camino todo en descenso por un bosque que promete reconciliarnos con este valle aunque no tanto como para alargar nuestra estancia



Pasamos por zonas de rocas muy lisas seguramente talladas por el glaciar cuando llegaba hasta aquí.

El camino se ve antiguo y en algunos tramos está casi enlosado. Seguramente este trazado unía los dos pueblos antes de construir la carretera.


Llegamos a Saas Grund, el paseo de bajada ha sido bonito pero mañana nos vamos a otro valle.



















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