Chamonix y el Tren cremallera de Montenvers

Primera mañana en Chamonix, nos hemos instalado en el camping "Les deux Glaciars".  Hemos desayunado con los glaciares encima de nosotros, hacía una mañana tan buena que presagiaba un día caluroso y así ha sido 36º C a este paso los glaciares les duran pocas décadas.

Al llegar ayer al camping ocurrió algo curioso. Al lado de donde ibamos a poner la caravana teniamos a una familia holandesa y cuando empezamos a entrar marcha atras con la trasera adornada con "España Campeona del Mundo" el pobre holandes nos ha pedido que si podiamos arrinar la parte de atras de la caravana al seto para no pasar varios dias con la "pintada" delante de su tienda. Hemos accedido, el pobre hombre está de vacaciones.

Chamonix es un sitio especial y se nota también en la cantidad de gente que hay, agobia un poco. Pero el entorno es muy fuerte, los glaciares del macizo del Mont Blanc descienden hacia la ciudad, parecen que van a arrollarlo todo. Hace 300 años debían llegar hasta la población, el espectáculo debía ser increíble, pues lo es ahora que han retrocedido  kilómetros y han perdido mas de 100 metros de altura del hielo.

Hemos ido a ver la estación del teleférico a la Aiguille du Midi, tenemos una reserva para mañana. Había mas gente que en la guerra y nos hemos acercado dando un paseo hasta la estacion del tren cremallera de Montenvers que sube por un valle donde está La Mer de Glace (el mar de hielo), una de la visitas obligadas en Chamonix. Este tren en 20 minutos te planta encima del glaciar.

En este tren no hay libertad de expresión y cuando quieres hacer chistes sobre lo guapo que es el chico de al lado te tapan la boca y hay que dedicarse a otra cosa...... mirar el paisaje por ejemplo.

La Mer de Glace es impresionante y mucho más grande de lo que parece, pues hay una superficie importante donde el hielo no se ve pues está debajo de una capa de piedras y tierra que va cayendo de las laderas. Como le ocurría al Glaciar negro que vimos en Vallouise el 3 de julio

Hemos recorrido un poco la zona y los paisajes son increíbles, tanto como la indicación de hasta donde llegaba el glaciar en 1820 que se encuentra casi 100 m por encima de donde esta ahora la parte superior.

De regreso hemos paseado un poco por Chamonix. El calor es agobiante 36º C hay mucha gente, es fiesta nacional. En la ciudad se pueden hacer fotos espectaculares de los glaciares bajando por las laderas.

La estación terminal del teleférico a la Aguja del Midi  donde si sale buen día subiremos mañana.

Muy interesante me ha parecido el monumento a Michel Gabriel Paccard mirando a la cumbre. Este valiente fue el primero en hacer cumbre en el Mont Blanc 4.810 metros el 8 de agosto de 1.786 casi nada. Creo que se merece el monumento.

Por lo demás Chamonix es demasiado multitudinario, mucho turista, mucho souvenir. No termina de gustarnos, pero claro cuando miras hacia arriba entiendes esta romeria. Este lugar es especial, me hubiera gustado venir en 1.786, debía ser una pasada con los glaciares llegado hasta el pueblo.